Excursión a Oropesa, Puente del Arzobispo y Lagartera.

Debido al gran interés que despertó esta excursión programada para el día 20 de febrero de 2013, hubo que repetirla una semana más tarde. En ambos casos, la salida se hizo con mucha ilusión y mirando hacia el cielo porque las nubes amenazaban lluvia.

La visita propiamente dicha de Oropesa, que cuenta con unos 3.000 habitantes, se inició alrededor de las 11, tras calentarnos con un café, desde la Plaza del Navarro donde nos esperaba José Luis, el guía que nos acompañaría toda la jornada. Contemplamos en primer lugar la torre de estilo neomudejar construida a principios del siglo XX y donde se encuentra el Reloj de la Villa, y la Biblioteca Municipal, obra de 1912 con su fachada recubierta de azulejos de Talavera de Ruiz de Luna y Guijo.

Nuestra siguiente parada fue la actual Plaza de la Constitución donde están el Ayuntamiento antiguo y la Iglesia de la Asunción. La portada es de estilo plateresco del siglo XVII, y entre la Iglesia y el Palacio se construyó el pasadizo de los Duques de Oropesa para que la duquesa pudiera asistir a misa sin tener que pisar la calle. Seguimos nuestro recorrido por antiguas y típicas calles y llegamos al Convento de Ntra. Sra. del Recuerdo donde solamente queda en su interior un magnifico retablo de Juan Correa de Vivar. A continuación fuimos al Convento de San Bernardo, hoy sin culto, que fue construido en 1605 para el enterramiento de D. Francisco de Toledo, V Virrey de Perú.

Desde San Bernardo llegamos a la Plaza del Castillo, donde está el Castillo – Palacio, principal monumento de Oropesa cuya primitiva construcción se remonta al siglo XII y fue antigua residencia de la familia de los Álvarez de Toledo, aunque desde 1931 lo ocupa el Parador de Turismo. Del Castillo destaca su Torre del Homenaje y su patio de armas.

Tras un corto tiempo dedicado a compras, después fuimos a comer al Restaurante “La Hostería” y en un ambiente exclusivo para el grupo compartimos una buena comida. Por la tarde y fuera de programa nos acercamos al Puente del Arzobispo para ver el famoso puente de piedra mandado edificar por el Arzobispo de Toledo, Pedro Tenorio, sobre el río Tajo para facilitar el paso de los peregrinos que iban al Monasterio de Guadalupe. Después de 600 años sigue siendo un nudo importante de comunicación por estar situado en un lugar estratégico, y tras contemplar esta espléndida obra nos dirigimos hacia nuestro último destino: Lagartera.

Aquí visitamos el interesante y curioso Museo del Bordado, con los trajes típicos que llegan a pesar 15 kilos y que utilizan las mujeres en los grandes acontecimientos. También pudimos contemplar en el mismo edificio la parte dedicada al pintor Marcial Moreno Pascual. Desde el Museo nos trasladamos a la Iglesia de San Salvador, del siglo XVI, dedicada al patrón de la localidad y posiblemente una de las que más gustaron. Pasadas las 18,30 h. emprendimos la marcha hacia Madrid donde unas dos horas más tarde llegábamos al destino tras haber conocido la historia de una muy interesante población.

Las encuestas solicitadas a los participantes a la excursión han demostrado su satisfacción por el agradable día que pasamos

G. Colleoni

R. Joga

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